¿Derecho a la vida?
¿Derecho a la vida? Hay gente que ama a sus mascotas. Yo misma, recuerdo, cuando hacía equino terapia procuraba llevarme el olor al caballo en la mano. Vi como los perros de asistencia interactúan con las personas con discapacidad. Veo muy poco, uso un software parlante para escribir. A veces imagino que dos perros guías tiran de mi silla cuan carrosa, jajaja. Esto no quita valor a mi reflexión: las personas con discapacidad múltiple, merecemos menos que un animal? ¿Cuál fue nuestro delito para estar presos? Uno cuando tiene esta condición, generalmente vive encerrado. Algunos en sus casas, otros en una institución , en nuestro propio cuerpo, sin los apoyos necesarios, obligados a ser como David frente a Goliat. La sociedad no te la hace nada fácil. La burocracia parece regocijarse con uno. Es un martirio conseguir pañales, remedios, turnos médicos, transporte adaptado y todo con una pensión chiquita que gracias a Dios no nos sacaron. En mí caso, vivo en una clí